En esta ocasión te hablaremos acerca de la diferencia entre hierro y acero, ambos materiales comúnmente utilizados en la industria de la construcción. Aunque pueden parecer similares, existen diversas cosas que los hacen totalmente distintos entre sí. Por ello, en este artículo, te explicaremos sus diferencias, así como su composición química, propiedades y usos.

Diferencia entre el hierro y el acero por su composición química

La principal diferencia entre el hierro y el acero es su composición química. El hierro es un elemento químico, mientras que el acero es una aleación compuesta de hierro y otros elementos. 

El contenido de carbono en cada uno es lo que les hace distintos. En el caso del hierro, este contiene más del 2.0% de carbono en peso; para producir acero, los niveles de carbono se reducen de 0.008% y 2.0%. El acero también puede contener otros elementos, como manganeso, silicio y cobalto, dependiendo del uso previsto. 

Para entenderlo mejor, debemos recordar que el hierro es un elemento y el acero es una combinación de metales derivada del hierro.

Propiedades del hierro y el acero

El hierro y el acero tienen propiedades físicas y mecánicas diferentes. El hierro es un material más suave y maleable que el acero, lo que significa que es más fácil de moldear y trabajar. El acero es más duro y resistente que el hierro, lo que lo hace ideal para aplicaciones que requieren resistencia y durabilidad. El acero también es más denso que el hierro, lo que significa que es más pesado.

Además, el proceso de fabricación del hierro es más sencillo, ya que consiste en fundir el mineral de hierro y separar las impurezas mediante un proceso de oxidación. Por otro lado, la fabricación del acero es más compleja, pues consiste en añadir otros elementos necesarios a la aleación de hierro para obtener las propiedades deseadas.

Usos del hierro y el acero

El hierro se utiliza principalmente en la fabricación de productos básicos como clavos, alambres, varillas, vigas, tuberías, láminas, chapas, placas, puentes, escaleras, entre otras soluciones. También, se encuentra presente en cocinas como: estufas, refrigeradores, en grandes tracciones como las anclas de un barco, cadenas o herrajes.

El acero, por otro lado, gracias a su dureza y durabilidad se utiliza en la construcción de edificios, puentes, automóviles, aviones y barcos. También, en la fabricación de herramientas, maquinaria pesada y hasta en utensilios de cocina (cacerolas, cuchillos o cubiertos).

Selección del material idóneo

Es importante seleccionar el material adecuado de acuerdo al tipo de proyecto de construcción que se está realizando. Si se requiere un material más suave y maleable, el hierro sería la elección correcta. Por el contrario, si se necesita un material más duro y resistente, el acero sería la mejor opción.
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