Deshazte del óxido resistente en cada superficie utilizando uno o más de estos impresionantes productos

Son muchos los removedores de óxido fáciles de conseguir y que seguramente tienes varios de ellos en tu hogar. Has fregado y fregado para eliminar el óxido naranja feo de tus herramientas de jardín y la mancha simplemente no se remueve. También esto puede ocurrir en el recubrimiento de los inmuebles o estructuras hechas de acero galvanizado, multipanel o aluminio. En general, de cualquier tipo de metal.

Cuando esto sucede, es hora de buscar un removedor de óxido. Pero con tantos en el mercado, cada uno con diferentes fortalezas y desventajas, ¿cuál es la mejor solución?

Hay productos a base de ácido que tradicionalmente se han utilizado para eliminar las manchas de óxido. También fórmulas más modernas que se basan en los avances de la química para eliminar el óxido o convertirlo en una sustancia completamente nueva. Sigue leyendo para aprender cómo funcionan los diversos tipos de removedores de óxido.

Entendiendo el óxido

Antes de intentar el proceso químico de eliminación del óxido, es útil comprender qué es el óxido en primer lugar. Básicamente, el hierro se corroe cuando está expuesto al oxígeno y la humedad (agua o humedad), el término técnico para el proceso es oxidación.

Cuando las moléculas de hierro se oxidan, forman un residuo de color rojo anaranjado (óxido) en cualquier superficie que contenga, o esté en contacto con, hierro. Incluyendo ropa, herramientas, grifos domésticos, duchas y accesorios de cromo en automóviles y bicicletas. Las manchas de óxido son difíciles de eliminar debido a su color brillante y su resistencia obstinada a los limpiadores típicos como el blanqueador y el jabón.

Los removedores de óxido no son buenos para prendas delicadas como la lana o la seda, pero para la mayoría de las otras superficies, encontrará su solución a continuación.

Tipos de removedores de óxido

Químicos

El método más común para eliminar el óxido involucra productos químicos de grado comercial, que se comen la acumulación de óxido y las manchas. Los tres tipos principales de removedores de óxido químico son:

Ácidos, incluyendo ácido nítrico, ácido acético (vinagre blanco), ácido fosfórico, ácido clorhídrico, ácido sulfúrico, ácido muriático, ácido oxálico y ácido cítrico.

El porcentaje típico de ácido en un removedor de óxido es de aproximadamente el 30%, la cantidad máxima que puede disolverse en agua y servir como agente de limpieza.

Aunque son efectivos y rápidos, generalmente funcionan a los pocos minutos de la aplicación, los ácidos emiten humos químicos fuertes. Por lo cual debes usarlos en un espacio exterior o bien ventilado y usar equipo de protección (gafas, mascarilla o respirador, guantes de goma).

Los ácidos también corren el riesgo de daños en la superficie debido a la corrosividad. Un removedor de óxido cáustico a base de ácido fosfórico, es adecuado para hierro o acero muy oxidado, pero no debe usarse en materiales delicados. Tales como telas, así como aluminio, cromo, acero inoxidable, cemento, fibra de vidrio, mármol, plásticos o superficies pintadas (eliminará la pintura).

Disolventes a base de petróleo. Aunque no son tan corrosivos o tóxicos como los ácidos, a menudo usan gases presurizados para la dispersión. Estos son inflamables y pueden tener riesgos respiratorios. Debes esperar hasta 24 horas para que estos productos tengan pleno efecto.

Hidrosulfito de sodio. Un ingrediente activo que a menudo se encuentra en los removedores de óxido en polvo. Este compuesto de sal es efectivo para eliminar las manchas de óxido de la tela.

También muestra su poder para eliminar las manchas de óxido del hormigón, la piedra caliza y el mármol. En los productos de limpieza para el hogar, el hidrosulfito de sodio elimina la necesidad de limpiar las manchas. Puede usarse en baños, inodoros, cocinas y lavadoras. Espere que las manchas de óxido se desvanezcan de cinco a 30 minutos después de la aplicación.

Agentes quelantes

Los removedores de óxido más nuevos son no tóxicos, libres de ácidos y ecológicos, y dependen de un proceso de quelación química. Las moléculas del producto se unen a las partículas de óxido, lo que facilita la eliminación del óxido sin dañar los materiales circundantes.

Por lo general, estos productos requieren que remoje los artículos oxidados durante un mínimo de 30 minutos hasta que pasen la noche. Un tiempo bien empleado que da como resultado herramientas y superficies libres de óxido y manchas.

Convertidores de óxido

Cuando hay demasiado óxido para un producto químico o quelante para eliminar por completo la acumulación, usa un producto que convierta el óxido en un revestimiento negro estable que tenga un doble propósito: protege la superficie original y funciona como una imprimación para pinturas a base de aceite y epoxi.

Aunque los convertidores de óxido no funcionan en aluminio, cobre, acero inoxidable o metal galvanizado, son adecuados para cualquier objeto de hierro o acero que se pueda volver a pintar. Tales como herramientas de jardín, equipos de césped, cercas y barandas de hierro. Después de aplicar, espere 24 horas antes de aplicar una segunda capa y 48 horas completas antes de pintar sobre el área oxidada.

Finalmente, elija los mejores medios de aplicación. Existen cuatro medios de aplicación para los removedores y convertidores de óxido:

• Las impregnaciones son mejores para eliminar el óxido de las herramientas, piezas de automóviles y otras superficies metálicas que no desea rascar frotando con almohadillas abrasivas o ácidos fuertes.
• Los aerosoles son útiles para la limpieza del hogar, así como las manchas de óxido que no son demasiado profundas.
• Los polvos son mejores para prevenir o tratar las manchas de óxido en la ropa, así como en los lavabos, inodoros y bañeras. Los removedores de óxido a motor también se pueden agregar a su lavadora y a su inodoro, lo que los hace ideales para hogares con alto contenido de hierro en el suministro de agua.
• Los convertidores de óxido, similares en fórmula a pintura o imprimación, se aplican con un pincel.