Las cámaras de refrigeración industriales se han convertido en elementos claves en la industria frigorífica. Y no es para menos, ya que su diseño, muchas veces constituido en multipanel, permite el ahorro de energía, y la conservación de los alimentos y productos diversos.

De hecho, sus funciones varían de acuerdo a las necesidades, características y requerimientos operativos de cada mercado o producto. De este modo, conocer las condiciones óptimas de las cámaras de refrigeración, mejora la calidad de conservación y consumo en la actividad industrial.

¿Qué son las cámaras de refrigeración industriales?

Una cámara de refrigeración brinda aislamiento térmico que permite conservar productos, a través de la congelación. Su diseño y correcto espesor, favorece la actividad continua de otros equipos, garantizando el ahorro de energía en los procesos industriales.

En otras palabras, las cámaras logran extraer la energía térmica mediante un sistema de refrigeración cerrado. Previamente diseñado con materiales de construcción de alta calidad.

Materiales y características de las cámaras refrigerantes

Una cámara se compone de cerramientos que se construyen a la medida. O con componentes prefabricados de baja conductividad que evitan la transferencia del calor al interior del recinto.

Para lograrlo, es preciso contar con un espesor adecuado como aislante que contrarreste las diferencias entre la temperatura interior y exterior. Y de esta manera controle al máximo las ondas de calor permitidas.

Usar multipanel junto con las cámaras es muy recomendable, puesto que su practicidad y calidad mejoran el rendimiento energético de las cámaras. Dado el nivel de densidad del revestimiento, es apto para prevenir condensaciones en el aislamiento.

Sin embargo, el rendimiento adecuado de la cámara dependerá del tipo de multipanel que se utilice en la fabricación de la misma. De manera que es importante contar con un equipo especializado que conozca a cabalidad el tema en cuestión, antes de proceder a su instalación.

Sistemas de las cámaras de refrigeración industrial

Como la correcta elección de espesor, material y tamaño influyen directamente sobre el consumo de energía. Se deben elegir sistemas de baja conductividad sin ningún tipo de abertura, que permita el acceso al aire exterior. Dicho esto, el cerraje de las puertas deben incluir cortinas de aire u otro tipo de tecnología que evite la filtración de aire caliente, una vez se abran las puertas.

Asimismo, la disminución del consumo energético en la instalación, dependerá de las técnicas de mantenimiento que se lleven a cabo. Sobre todo cuando se quiere extender la vida útil de la máquina, por lo que es fundamental ponerlas en práctica.

Por último, es esencial que la relación entre la presión de condensación y evaporación de la cámara sea lo más baja posible. Para de esta forma optimizar las condiciones de temperatura y humedad, y complementar el ciclo refrigerante con máxima eficiencia.

Aplicaciones de las cámaras refrigerantes

El uso de las cámaras refrigerantes industriales se ha extendido a diversos mercados e industrias. Esto gracias a sus propiedades termodinámicas, que garantizan la conservación de múltiples productos.

El sector agroalimentario y farmacéutico, se ha consolidado y evolucionado gracias al uso de esta tecnología. Potenciando la actividad industrial para el correcto acondicionamiento de los recursos que necesitamos a diario.

Ventajas de las cámaras

• Facilitan la extracción del calor en espacios pequeños y grandes.
• Extienden la vida útil de materiales biológicos o productos alimenticios perecederos.
• Optimizan el ahorro energético industrial.

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