Cómo evitar la corrosión es una de las preguntas más habituales que se hacen las personas. Para comenzar, hay que definir qué es la corrosión. Ésta es un proceso químico el cual deteriora los metales producto de reacciones con el medio ambiente y otros factores como añadir sustancias abrasivas. Un ejemplo de esto es cuando el agua comienza a oxidar una lámina hecha de algún metal, ya sea porque está expuesta todo el tiempo al agua o a un ambiente húmedo. Cabe mencionar que no sólo los metales son proclives a deteriorarse por oxidación. Por ejemplo, otros materiales que pueden sufrir daños son las cerámicas.

La corrosión también implica una reducción en la funcionalidad de los objetos o en los materiales de construcción. Esto incrementa la posibilidad de alguna falla o ruptura que debe repararse, generando un gasto adicional para el propietario. Además de que se reduce la seguridad en caso de tratarse de un inmueble. Es por estas razones que lo ideal es evitar este fenómeno y a continuación se presentan algunos métodos para conseguirlo.

Cómo evitar la corrosión por galvanizado

Se puede decir que es la técnica la más recomendada por su eficacia y durabilidad. Se trata de sumergir algún metal, por ejemplo, el acero, en un baño de zinc. A esto se le conoce como galvanizado por inmersión. Esto debe realizarse a temperaturas muy elevadas para lograr una aleación y así obtener acero galvanizado. Este proceso consigue brindar una capa protectora que hace muy difícil la aparición de la corrosión. Es esta técnica es la que emplea nuestra empresa para la fabricación del multipanel que te ofrecemos.

Si quieres poner en marcha un proyecto constructivo, sin importar de la edificación que desees desarrollar, contar con materiales como los paneles tipo multipanel te son de gran ayuda. En el caso del acero galvanizado la durabilidad es muy elevada, proporciona seguridad, además de otras ventajas. Por ejemplo, en sus componentes se encuentran presentes retardantes químicos que le brindan mayor resistencia en caso de existir fuego.

Método por aplicación de pintura

Como se dijo antes, una de las técnicas principales para proteger al acero y otros metales es el galvanizado. Éste puede hacerse desde fábrica sumergiendo metales en un baño de zinc. Sin embargo, también una manera muy fácil de proteger los metales es mediante la pintura de zinc.

Esta pintura está fabricada a base de zinc de alta pureza. También es conocida como pintura de protección catódica y su función es contener la oxidación y prevenir su aparición posteriormente. Las superficies recubiertas con este esmalte quedan protegidas y resisten la corrosión sin necesidad de volver a aplicar otra capa de pintura.

Para aplicar el esmalte es necesario limpiar previamente la superficie a cubrir. La idea es que se adhiera perfectamente al acero o el metal que deseas proteger. También es recomendable aplicar una solución abrasiva que retire cualquiera otra sustancia existente en la superficie. En caso de no tener, se procede a aplicar la pintura de zinc, que puede estar en presentaciones líquida o en aerosol. Cuando hayas finalizado el proceso, la superficie tendrá una protección durante mucho tiempo, alargando su vida útil por mucho más tiempo.

Aplicación de biopelícula

Una alternativa a los métodos anteriores es la implementación de microorganismos, una técnica conocida como biopelícula. Se trata de una sustancia compuesta de bacterias y se encuentra en una presentación de hidrogel. Es capaz de brindar una protección completa a partir de una comunidad viva de microorganismos.

Cómo recomendación final, es importante mantener las superficies metálicas fuera de toda humedad y completamente secas. En caso de no ser posible, la tarea es secar con regularidad para no favorecer la aparición de la corrosión. Cabe recordar que si en tu proyecto de construcción contemplas el uso del multipanel, éste requiere de muy poco mantenimiento y es resistente a las inclemencias del medio ambiente.

Finalmente recuerda que todo método debe ser aplicado por un experto en la materia.